Ya es más fácil mandar dinero a Brasil.
Hasta ahora, había:
– o que mandarlo como inversión, esto es, como compra de participaciones o creación de empresa, o para compra de inmuebles.
– o mandarlo como un préstamo, que si era para un plazo inferior a dos años pagaba un impuesto de operaciones financieras (IOF, luego nos quejamos en España) de un 6%. Acortando, es más fácil enviar un dinero para hacer inversiones temporales.
No hay que olvidar que cualquier envío de dinero debe pasar por el Banco Central de Brasil, y debe tener una «matrícula». Si no, después puede haber problemas para repatriarlo.